Moderno, con estilo y una decoración digna de atención, Migrante está administrado por un joven equipo muy cortés y acogedor. De la cocina abierta no paran de salir platillos contemporáneos elaborados con enfoque internacional, entre ellos el crujiente langostino en tempura thai con kosho de mandarina y rabanitos en escabeche o el churro frito de paté con calabaza, mantequilla, mamey y avellana tostada. El minigrilled sándwich de alcachofas confitadas con kampachi es un delicioso snack, perfecto para dar paso a un principal como la lobina a la parrilla, beurre de mejillones y yuzu.